Asegurándose de que su
mamparas de ducha permanece resistente a las manchas de agua, la corrosión y el óxido requiere cuidado y mantenimiento adecuados. A continuación se detallan algunos pasos que le ayudarán a mantener la calidad y la apariencia de su mampara de ducha:
Elija los materiales adecuados:
Comience seleccionando materiales que sean naturalmente resistentes a las manchas de agua, la corrosión y el óxido. Por ejemplo, el acero inoxidable, el aluminio y el vidrio templado son conocidos por su durabilidad y resistencia a estos problemas.
Limpieza periódica:
Establezca una rutina para limpiar su mampara de ducha. Utilice un limpiador suave y no abrasivo diseñado específicamente para los materiales de su gabinete. Evite los productos químicos agresivos, ya que pueden dañar el acabado.
Escobilla de goma después de su uso:
Después de cada ducha, utilice una escobilla de goma para eliminar el exceso de agua de las superficies de vidrio y metal. Esto evita que se formen manchas de agua y depósitos minerales.
Evite la acumulación de espuma de jabón:
Se pueden acumular restos de jabón en las superficies de vidrio. Utilice una escobilla de goma, un paño suave o una esponja no abrasiva para eliminar periódicamente los residuos de jabón.
Limpiar y lubricar hardware:
Si su gabinete tiene herrajes metálicos como bisagras y manijas, límpielos y lubríquelos periódicamente para evitar la corrosión. Suele ser adecuado un lubricante a base de silicona.
Mantenimiento del sellador:
Revise los sellos y el sellador alrededor del gabinete en busca de desgaste. Reemplace cualquier sellador dañado o deteriorado rápidamente para mantener la estanqueidad.
Utilice productos repelentes al agua:
Aplique productos repelentes al agua diseñados para vidrios de ducha para crear una barrera protectora. Estos productos pueden facilitar la limpieza y reducir la formación de manchas de agua.
Evite los limpiadores abrasivos:
Abstenerse de utilizar limpiadores abrasivos o estropajos en la mampara de la ducha, ya que pueden rayar y dañar la superficie, haciéndola más susceptible a las manchas y la corrosión.
Ventilación:
Asegúrese de que su baño tenga una ventilación adecuada. El flujo de aire adecuado ayuda a reducir la humedad, lo que puede contribuir a la corrosión y el crecimiento de moho.
Abordar los problemas del agua dura:
Si tiene agua dura en su área, considere instalar un sistema de ablandamiento de agua en toda su casa para reducir los depósitos minerales en el vidrio y los accesorios.
Inspecciones periódicas:
Inspeccione periódicamente la mampara de su ducha para detectar signos de corrosión, óxido o daños por agua. Aborde cualquier problema con prontitud para evitar que empeore.